Todas las tecnologías de impresión 3D fabrican piezas capa por capa.
Con las impresoras SLS, MJF y HSS, estas capas a veces pueden ser seleccionadas por el usuario, pero el proveedor del servicio de impresión define la configuración del grosor de la capa.
La razón de esto es que a veces es ineficiente ofrecer diferentes espesores de capa para estas tecnologías, ya que los sistemas deben fabricar varias piezas a la vez; dificultando la racionalización de los procesos de producción.
Sin embargo, FDM es diferente, ya que puede ser eficiente para fabricar piezas individuales. Con la impresión FDM podemos ofrecer cuatro opciones de capas diferentes, dependiendo del material seleccionado, que van desde 0,127 mm a 0,333 mm. Por lo general, los sistemas SLS, HSS y MJF tienen espesores de capa establecidos entre 0.08 mm y 0.12 mm.
Seleccionar el grosor de la capa no solo afecta la apariencia de la pieza, sino que también afecta el rendimiento. Un espesor de capa más bajo dará un acabado superficial más liso, sin embargo, como hay más capas en la parte, la resistencia será más débil que una construcción de parte con un espesor de capa más alto. Típicamente, un espesor de capa de rango medio proporciona un buen equilibrio entre el acabado superficial y la resistencia.
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